La siguiente ley es la ley de atracción y repulsión.
Todo aspirante está con la ley de atracción y repulsión.
Nos atraen algunas enseñanzas para salvarnos de
nuestra esclavitud. ¿Pero cuánto dura esto? No dura
mucho. Durante todo el tiempo nos asociamos con
lo material y nuestra energía se ve afectada por lo
material. Todo tiene el olor de lo material. Entonces buscamos algo ligeramente más sutil que lo material
denso. Nos absorbe durante un tiempo, y después
lentamente desarrollamos aversión por aquello. Es
por eso que hacemos la plegaria sinceramente dos
días y el tercer día nos dormimos o nos la saltamos.
El
resultado es la incapacidad de continuar la práctica
de lo que pensamos que es bueno para nosotros. Hay
algo que tira de nosotros.
Hay una atracción hacia
el espíritu, y después inmediatamente la energía
material en nosotros se vuelve dominante.
La atracción – repulsión sigue y sigue. Nos
levantamos un poco y caemos.
¡No tiene fin!
Cuando conseguimos cierto ritmo en alguna
práctica espiritual, llegan determinados programas
en nuestra vida que parecen importantes y al
atenderlos perdemos el ritmo. Cada vez que nos
llega un programa, deberíamos comprobar si altera
el ritmo que tenemos establecido. ¡Nadie nos lo ha
impuesto! Ningún verdadero Maestro impone, sino
informa.
Las imposiciones nunca funcionan. Ante
las religiones impuestas, la gente se rebela.
Por lo
tanto, la imposición no es la manera. Si queremos,
trabajamos en ello. Pero estamos acostumbrados a
trabajar de otras maneras y también tenemos otros
hábitos. Otros hábitos interfieren en el nuevo hábito
y este no prevalece. Así una y otra vez. Por aversión
desechamos ciertas cosas prematuramente, y después
regresan. ¡Esta es la ley!
Todo lo que hayamos rechazado con despecho
regresará hacia nosotros. Le pasó a Bhishma a través
de Amba. Las renuncias tienen que darse de una
forma amigable, de forma comprensiva y directa.
Pero si desechamos completamente una parte de
nuestra naturaleza, volverá como una ola gigante y
nos tirará al suelo. No rechacemos. Muchos aspirantes
emocionales rechazan muchas cosas de la naturaleza
material hasta el punto de odiarlas. Rechazan a las
mujeres, rechazan la mínima comodidad para el
cuerpo y también rechazan el mundo. Crean una
oposición. Esto volverá.
De manera que se tiene que
resolver con amigabilidad.
Tenemos que hablar con nosotros mismos
y preguntarnos si realmente lo necesitamos. No
lo hagamos para sentirnos grandes. Mientras
caminamos hacia la divinidad, la grandeza no es en
absoluto una cualidad. La bondad y la simplicidad
son las cualidades. En tanto que llegas a un acuerdo
contigo mismo, lo harás. Avanzamos con el acuerdo
y no con la imposición. La historia de Vemana
es una historia de rechazo total al sexo en la vida
pasada. Él rechazó el sexo con mucho odio para
practicar la espiritualidad en sus vidas anteriores.
Como consecuencia, no pudo alcanzar su objetivo
y en la vida siguiente se convirtió en tal depravado
que incluso quería sexo con la mujer de su hermano.
Una vez hubo pasado la primera mitad de su vida por todo lo que había rechazado, que era sólo sexo,
regresó. Completó lo que había rechazado. Entonces
regresó para convertirse en un gran sabio vidente y
alquimista. Esta es la historia de Vemana.
¿Por qué abusó tanto y cómo pudo
repentinamente convertirse en un sabio? Eso
normalmente no es posible. Existe la historia de la
vida pasada, cuando siguió la práctica del discipulado
con rechazo y después resurgió como una ola gigante
y lo atrapó durante la primera mitad de su vida. Fue
una limpieza. Así es también la historia de Tulasidas.
Se casó con una mujer y era una bestia sexual. Esta
era su situación. Era muy bestial en su actitud sexual
hacia su mujer. Nunca dejaba a su mujer regresar a
casa, ni siquiera durante las vacaciones. Debido a
algún acontecimiento, su mujer tuvo que ir a su casa.
La casa de sus padres estaba al otro lado de Benarés.
Él estaba en este lado.
La envió por la mañana y por
la tarde sintió tal necesidad de sexo que por la noche
atravesó a nado las fuertes corrientes del Ganges,
alcanzó la otra orilla, escaló por las tuberías, llegó al
primer piso por la ventana y entró en la habitación
de su mujer. Su mujer le vio y estaba estupefacta.
Disgustada, le dijo: “¿Eres una bestia o un hombre?
¿No te puedes abstener ni que sea por un día?
¿Tienes que arriesgar tu vida cruzando el río y llegar
aquí sólo para tener sexo?”. Ese fue el momento
en el que él cambió. En una vida anterior fue un gran devoto de Rama y había rechazado esta parte.
Hay una historia pasada que normalmente no se
cuenta. Cuando uno tiene pasiones excesivas y de
golpe las deja, indica que en las vidas pasadas lo
había rechazado.
Lo que nos desagrada regresa. Los polos
opuestos se atraen y los polos iguales se repelen. Por
lo tanto, un excesivo gusto conllevará lo contrario,
que es excesivo desagrado. Entonces no tengamos
excesivos gustos o excesivos disgustos. Eso se tiene
que resolver en nuestra propia vida.
Aquí es cuando
les digo a los que trabajan conmigo que miren lo
contrario.
Enseño muchos contrarios. A los que
están próximos a mí les enseño los contrarios.
Cuando les gusta algo, trato de mostrarles
el otro lado. Así los gustos y aversiones se
neutralizan. De lo contrario, la ley de atracción y
repulsión trabaja en nosotros. A aquella persona
inmersa en las obligaciones materiales le seguirá
mucha actividad espiritual. Por eso, después de
cada convivencia de grupo, la gente tendrá cargas
pesadas y trabajos inesperados.
No es sólo el trabajo que hemos pospuesto, sino
que todavía vendrá más y nos quitará nuestro ritmo
diario. Justo antes de entrar en un gran evento de
convivencia de grupo que anhelamos muchísimo,
algo ocurre que nos viene como una gran nube que
lo cubre todo y no nos deja ir.
Así es como la naturaleza nos dice que no
vayamos demasiado lejos. Sed moderados. La
moderación es una gran virtud en el discipulado.
No estar demasiado con nada. Marte lo ve y te da
excesiva orientación hacia un lado, y después lo
revierte y te lleva hacia el otro lado. Saturno limita.
No es Saturno quien limita, sino nuestra actitud
hacia lo material que impulsa y anima a Saturno.
Entonces tenemos que seguir las regulaciones de
Saturno. Igualmente, hay regulaciones de Marte
y de Venus. Así es como se van sucediendo las
atracciones y repulsiones, arriba y abajo, hasta
el momento en que los opuestos se armonizan y
aterrizamos en la síntesis.
Síntesis
La síntesis es la ley por la cual nos impregnamos
y es la ley de impregnación. Somos aéreos, y por
lo tanto no nos enganchamos con las cosas. Somos
amigables con todos y la gente se siente cómoda con
nosotros. Todas estas cosas hacen de nuestra vida
una vida de bienaventuranza y felicidad. Entonces
nuestras energías no están limitadas por los gustos
y aversiones o por la materia, y por lo tanto
nuestras energías impregnan. Esta impregnación es
la independencia completa y la libertad completa.
Podemos entrar en el cuerpo y trabajar con ella y podemos salir del cuerpo y trabajar con ella. La
síntesis es para aquellos que no están condicionados
por la materia y por los gustos y aversiones. Síntesis
es la palabra más machacada en los últimos cincuenta
años. Todo el mundo utiliza la palabra síntesis. En
tanto que estamos atados a lo material y a los gustos
y aversiones, todavía no estamos en síntesis. Pero la
síntesis ya está en el aire.
Cuando la síntesis desciende, hace un gran
trabajo. Hay algunas leyes subsidiarias, como la ley
de transmutación y la ley de transformación. Hay
muchas leyes, pero principalmente hablamos de las
siete principales.
¿Cómo funciona la ley de transmutación y cómo
ocurre la ley de transformación?
La de transmutación
es la ley que funciona con tu esfuerzo. Es Purusha
prayatna.
Es tu esfuerzo por moverte hacia arriba, y
en este proceso ocurre la transmutación.
La transformación ocurre por el descenso de las
energías nuevas. Cada vez que inspiramos, ocurre
alguna transformación. Por ello cada vez que algo
nuevo entra en nosotros, ocurre una transformación.
Cuando entra algo más sutil que nuestra energía, nos
transforma.
Algo más sutil significa más magnético
y más eléctrico.
Cuando trabajamos para ascender,
causamos la transmutación. La transmutación es
Purusha prayatna, y la transformación es daivanugraha.
Así se explica en las escrituras sagradas orientales.
Cada vez que rezamos con intensidad, esta
plegaria es un proceso de transmutación.
Entonces
esperamos, y cuando las energías descienden,
ocurre la transformación. Cada vez que invocamos
las energías de síntesis, cuando estas descienden
en nosotros, sucede la transformación.
Es como
perforar la colina desde los dos lados para formar
un túnel. La transformación es un proceso de
descenso desde arriba, y la transmutación es nuestro
esfuerzo para cambiar. Es como un trozo de hierro
avanzando hacia un imán, esto es transmutación, y
después, cuando el imán alcanza el trozo de hierro,
es transformación.
Un maestro magnético es un transformador.
Da el impacto eléctrico y magnético. Cuando
un imán alcanza un trozo de hierro, el trozo de
hierro necesariamente se transforma. Por lo tanto,
tenemos que acercarnos a un imán o dejar que el
imán se nos acerque.
La síntesis se nos está acercando en esta era.
Se ha decidido en los Círculos Superiores para
transformar a la humanidad. Hay un descenso
de la energía de síntesis. Si dejamos que entre en
nosotros, nos transforma y no tenemos que hacer
todo este esfuerzo. Esto es exactamente lo que dice
el Maestro CVV. Esta es la ley de síntesis. La ley de
síntesis desciende desde arriba y nos eleva.
La ley
de atracción y repulsión está durante el tiempo que estamos haciendo el esfuerzo, y la ley de economía
cuando estamos atados a lo material y nos movemos
en círculos de nacimiento y muerte. Estas son las
siete leyes y tenemos que trabajar con ellas.
Apliquemos la enseñanza
en la vida diaria
Allí donde se aplican estas leyes, la forma
de vida es como un juego. Cuando estudiamos
algo y podemos trabajar con ello en nuestra vida
diaria, podemos observar qué ley funciona en
cada momento. Así, cuando estudiamos astrología
deberíamos ser conscientes de la energía planetaria
del día y de la energía solar del mes. Estas cosas deben
permanecer en el trasfondo de la mente, y entonces
funcionan muy bien. Así es como las enseñanzas o el
estudio deberían llevarse a la vida diaria a través de
la experimentación.
Sólo a través de la experimentación tenemos
la experiencia.
Si no experimentamos, no hay
experiencia.
Que así sea y que sigamos caminando de
esta manera, en tanto que las leyes lo permitan.
Estas
leyes son leyes cósmicas. Se dice que son cósmicas
porque son ciertas incluso para la existencia cósmica.
Estas leyes funcionan en los planos cósmico, solar
y planetario. Son aplicables a todos sin excepción.
Esta enseñanza es una humilde exposición a los pies de Madame Blavatsky.
Lo que he presentado es sólo
un fragmento de la doctrina. Se han dado algunas
cuestiones, y si tenemos la voluntad de trabajar con
ellas, podemos avanzar y luego asimilar la doctrina y
disfrutar de su grandeza.
Que todos seamos bendecidos por la Jerarquía.
El libro pertenece a la Jerarquía y se dice que puede
funcionar durante 300 años. Este trabajo todavía no
ha empezado.
El libro se hace cada vez más relevante
a medida que avanzamos hacia el futuro. Muchas
cosas del futuro de las que ella habló respecto a la
ciencia, ahora se están cumpliendo, y su doctrina
también se está leyendo en el campo científico.
El libro es válido en cada una de sus líneas y da
claves para cada dimensión de la actividad humana.
Tal es la belleza del libro. Que continuemos y
sigamos encontrándonos, que sigamos aprendiendo,
y que lo hagamos lo mejor posible dentro de nuestras
capacidades, y esperemos que la Gracia se derrame
sobre nosotros.
Gracias. ¡Namaskaram!
Dr. Sri K. Parvathi Kumar.
Muchas gracias.
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